Sir George Martin
George Martin. Cómo George Martin y los Beatles formaron una colaboración duradera Martin, un susurrador de Lennon y partidario de McCartney.
Fue un maestro colaborador que sacó el máximo provecho de sus excepcionalmente talentosos compañeros de equipo.
Sir George Martin, quien firmó un contrato discográfico con los Beatles en 1962 y se convirtió en un influyente productor y colaborador de la banda, falleció pacíficamente el 8 de Marzo de 2016 a los 90 años, según numerosos informes.
Poco después del anuncio, Paul McCartney, miembro de los Beatles, escribió en su blog sobre lo que convirtió a Martin en un compañero de equipo tan especial:
Llevé la canción “Yesterday” a una sesión de grabación y los chicos de la banda me sugirieron que la cantara en solitario y me acompañara con la guitarra.
Después de haber hecho esto, George Martin me dijo: “Paul, tengo la idea de incluir un cuarteto de cuerda en el disco”. Le dije: “Oh, no, George, somos una banda de rock and roll y no creo que sea una buena idea”.
Con el trato amable de un gran productor, me dijo: “Probemos y si no funciona no lo usaremos y nos quedaremos con tu versión en solitario”. Estuve de acuerdo y fui a su casa al día siguiente para trabajar en el acuerdo.
Martin, explica McCartney, terminó “poniendo el violonchelo en la octava baja y el primer violín en una octava alta y me dio mi primera lección sobre cómo se entonaban las cuerdas para un cuarteto”.
Una vez que McCartney escuchó la versión de Martin, se emocionó al darse cuenta de que sus instintos eran correctos. “Pasé semanas contándole a la gente sobre esto”.
Hay otros ejemplos del dominio de Martin como colaborador y proveedor de comentarios constructivos.
“Tradujo muchas ideas a medio formar que tenían, especialmente las de John Lennon “, dice el historiador musical Steven Lee Beeber, autor de The Heebie-Jeebies at CBGB’s: A Secret History of Jewish Punk.
Por ejemplo, John Lennon le pidió a Martin que combinara dos de sus versiones de “Strawberry Fields”, aunque estaban en tonos y tempos diferentes.
“Puedes hacer algo al respecto”, supuestamente dijo John Lennon. “Tú puedes arreglarlo.”
Sir George Martin
Martin y el ingeniero Geoff Emerick aceleraron una versión y desaceleraron la otra. El resultado fue igualar los tempos.
“La edición sólo es detectable por un ligero cambio en el ambiente alrededor del minuto, un efecto que sólo aumenta la sensación de dislocación de la canción”, informa la BBC.
Quizás no sea una sorpresa que Martin y los Beatles trabajaran bien juntos. Beeber señala que uno de los atractivos iniciales de Martin hacia la banda fue cómo su sentido del humor coincidía con el suyo.
En su primera reunión, en 1962, Martin, un músico de formación clásica, sermoneó a la banda sobre cómo tendrían que hacer muchos cambios para convertirse en artistas exitosos.
Cuando terminó, preguntó si tenían algo que decir en respuesta. George Harrison respondió: “Bueno, para empezar, no me gusta tu corbata”.
“La broma rompió el hielo y los Beatles se relajaron y adoptaron el modo comedia”, señala la BBC.
En muchos sentidos, la colaboración entre Martin y los Beatles estableció el modelo para la relación ideal entre productor y artista discográfico.
Por ejemplo, se pueden observar ecos de la dinámica Martin-Beatles en la exitosa comunicación bidireccional entre la artista country Loretta Lynn y el productor Jack White.
Lo más destacado para los lectores en entornos empresariales es que deben ser conscientes de la forma en que Martin convenció a McCartney para que abandonara su zona de confort, como un padre que insta a su hijo a probar un nuevo alimento: “Probémoslo y si no funciona, ganaremos”.
No lo uses y usaremos tu versión en solitario”. No hubo demandas. No hubo órdenes. Fue sólo una sugerencia para experimentar y una promesa de no tomar decisiones difíciles hasta que el experimento se desarrollara.
Así surgen colaboraciones duraderas.
Sir George Martin